¡Cuidado con la chica sexy!

Ahora en la actualidad es normal que haya mujeres muy cariñosas y exhibicionistas con títulos de "amigas buena onda" como estilo Dalila que cautivó a Sansón con su belleza y su encanto (leer Jueces 16:1-31 ). Ella era aquel tipo de mujer que tenía que conseguir lo que quería, aunque para eso tuviera que hacer un drama y llorar toda la semana.

Dalila

La mujer seductora tiene sus propios métodos, es insistente, chantajista, provocativa e instigadora.

Dalila le engatusó y persuadió a Sansón, se quedó molesta y haciendo pucheros hizo exigencias.

Con su habilidad para manipular y seducir a Sansón ella descubrió el secreto de su marido y se los entregó a sus enemigos a cambio de dinero y sin ningún remordimiento.

A fin de cuentas, ese era su propósito desde el comienzo.

Sansón nunca debió haberse casado con una mujer extranjera, o sea que no era de la misma fe.

Ser precipitado le llevó a la destrucción en su vida espiritual, casarse apresuradamente sólo por la atracción física es un paso peligroso.

"Infelizmente en la actualidad también vemos este tipo de comportamiento en la escuela, en la colonia, en el trabajo y a veces en mujeres que están dentro de las iglesias, mas con la única intención de seducir y llamar la atención."

Son mujeres que no respetan compromisos y actúan de manera consciente e intencional.

Ellas saben muy bien lo que hacen, saben que está mal, mas quieren ir hasta el fin.

La mujer sensual usa su poder de seducción para alcanzar sus objetivos maquiavélicos y ambiciosos sin tomar en cuenta la palabra de Dios.

Otro caso similar de una mujer sin escrúpulos fue la esposa de Potifar tratando de persuadir a José (Leer Génesis 39:1-21 ). Pero en este caso José actuó de la manera contraria a Sansón, es que sí no hay escusas para resistirse y huir de los juegos seductores de ciertas mujeres.

 

Ya escuchaste aquella frase: “no me importa si es comprometido, todavía no está casado, voy a seducirlo hasta el fin, él será mío...”. O aquella otra: “no me interesa si es casado, yo voy a lograr mis objetivos, voy a tener lo que quiero aunque tenga que pasar por encima de todos” "Al cabos que yo no soy celosa" "amor es compartir no" entre otras tantas.

Siempre actúan con segundas intenciones, para conseguir ya sea dinero, posición, promoción o simplemente por el placer de destruir la vida de los hombres primero los seducen hasta enamorarlos, se divierten obteniendo lo que querían de ellos y después los cambian por alguien mejor a su vista.

Claro que el fin de estas mujeres no será nada bueno, pues ya saben quien está detrás de ellas y Dios no tolera este tipo de comportamiento, ¿será que vale la pena tratar con ellas? En usted está quien quiere ser ¿Sansón o José?